Durante casi una semana, hemos tenido una colonia familiar en la que hemos estado casi treinta personas en algunos momentos, disfrutando del Pirineo en el valle del río Aragón.
Han sido días de juegos, alegría, contemplación, oración, talleres (reflexología podal y geocatching), excursiones (Villanúa, Ibón de Estanés, Santuario de Iguacel…) y servicio compartido.
Damos gracias al Señor por este tiempo de vacaciones compartido en el que hemos cargado las pilas, a nuestros sacerdotes, Manolo Liarte y David Ceamanos, por compartiruno de los días, y a los escolapios por este maravilloso albergue juvenil.